POST-VACACIONAL

Los días siguientes al final de las vacaciones de verano son los más propicios para que se produzcan rupturas matrimoniales. Como lo oyen, estos días aumenta considerablemente el número de separaciones y divorcios, esto confirma "la teoria de la posibilidad", cuanto más tiempo se pasa con el marido o la esposa más posibilidades hay de que se produzcan disputas.
Eso de que el roce hace el cariño yo no lo acabo de ver, más bien el roce enciende la mecha, y ya se sabe , cuando una mecha está encendida lo lógico es que acabe en explosión.
Las discusiones pueden ser por 20.000 causas, aquí señalaremos algunas de las más frecuentes:

- Elección del lugar de vacaciones.
- Ir a hotel o a apartamento.
- Gastos excesivos.
- Aglomeraciones en las playas.
- Atascos que crispan los ánimos.
- Agobio por el fin de las vacaciones.
- La vuelta al cole de los niños.

En fin, que el final de las vacaciones se puede convertir en un polvorín.
Luego claro, que nos dá el síndrome post-vacacional, que digo yo, casi mejor no habérlas cogido, la de dinero y disgustos que nos hubiéramos ahorrado.
Para otro año pensároslo dos veces antes de iros a pasar un mes entero junto a vuestros respectivos.
Lo mejor sería uno a Valencia y el otro a Galicia, que más que el roce la distancia es la que hace el cariño.